Las mariquitas pertenecen a la familia de los coccinélidos, que son en su mayoría carnívoras, menos el 16% de las especies de esta familia que conforman la subfamilia epilachninae y son vegetarianos.
En general, las mariquitas son unas voraces depredadoras de pulgón, pero sobretodo son sus larvas las que hacen un control de la plaga del pulgón, ya que pueden llegar a comer 150 pulgones desarrollarse. También se alimentan de cochinillas, ácaros, larvas de moscas y de otros insectos.
Reconocerlas
Ya sabemos distinguir una mariquita, pero debemos reconocerla en su estado larvario y saber cómo son sus huevos, para no confundirlos, protegerlos y favorecer su desarrollo.


Los huevos de mariquita son amarillos anaranjados, ovalados y los puedes encontrar en grupos de 10 a 50 huevos en ramas de los árboles, hojas o troncos, especialmente cerca de las colonias de pulgones. Después de una semana de la puesta los huevos eclosionan y nacen las larvas de mariquita.
La larva de la mariquita es un bichejo de esos que no quieres ni imaginar en tamaño dinosaurio. Es alargada, con 6 patas, espinosa o verrugosa, oscura y con puntitos de colores claros. Se mueve exageradamente rápido y se como los pulgones como si fueran hamburguesas.
Una vez se desarroyan las larvas pasan a ser pupas, que es el último estado antes de convertirse en una hermosa mariquita adulta.