La Linaria (Linaria vulgaris) es una planta de tallo erguido de unos 25 cm de altura de flores amarillas muy llamativas, posicionadas una encima de la otra en lo alto del tallo. Las flores son bilabiadas (se componen de dos partes o “labios”) en la que la parte superior es amarilla con unas finas venas oscuras y la parte inferior más anaranjada.
Las flores se encuentran cerradas hasta que un insecto de gran tamaño la abre, por lo cual sólo se alimentan de ella los abejorros y en menor medida las abejas. El fruto es una cápsula seca con semillas aplanadas, con alas para dispersarse a distancia de la planta madre.
Medicinal
La infusión de té se prepara con 1 o 2 cucharaditas de la las flores infusionadas en de 2 a 4 tazas de agua hirviendo durante 18 minutos y se toma lo largo del día.
Es una planta con reconocidos efectos medicinales. Las flores de Linaria se han administrado en infusión para ayudar a los problemas de digestión y trastornos urinarios, ya que se considera diurética y laxante suave.
Por sus propiedades antiinflamatorias se ha utilizado en cataplasmas de uso tópico para el tratamiento de hemorroides, ulceras vasculares, para lavar heridas supurantes y en erupciones cutáneas. También se informa que tiene efecto sudoríparo.
Otros usos
Se ha utilizado para teñir la seda y la lana del color de aceituna y se dice que en Suecia la suspenden en las habitaciones después de hervida con leche para destruir las moscas, ya que repele los insectos.
Avisos
No se conocen riesgos para la salud ni efectos secundarios con una administración adecuada.
Hay discusión sobre si esta es una planta tóxica para los rumiantes. Lo que hemos podido observar es que las cabras nunca se la comen, por lo que nunca se la vamos a dar para alimentarlas.
Es una planta muy resistente a diferentes fitosanitarios, esparce muchas semillas y sus raíces son muy fuertes, por lo que puede llegar a ser invasiva.